En julio de 2021, Paco Rabanne lanzó su primera fragancia conectada y recargable: Phantom. El diseñador recurrió a la experiencia de VPI para crear el tapón atomizador conectado para el frasco de su fragancia masculina de nueva generación. Para el lanzamiento de su nueva fragancia femenina, en la misma línea, volvió a recurrir a la experiencia de la empresa francesa especializada en la inyección y el ensamblaje de piezas plásticas estéticas.
VPI trabaja mano a mano con las marcas
Faiveley Plast Beauty (VPI) se ha comprometido a establecer relaciones a largo plazo con las marcas, como demuestra su nueva colaboración con la casa de perfumes Paco Rabanne. Tras superar el reto de crear un tapón de pulverizador conectado ultrafino para la fragancia masculina Phantom, el fabricante ha aceptado ahora el reto de crear una edición femenina. El reto era el mismo: crear un tapón con un chip NFC para rellenarlo, con una calidad estética sin concesiones. El reto técnico ya se había superado en la primera versión, así que el camino estaba allanado. Pero sigue siendo un proyecto muy complejo.
El reto técnico del tapón pulverizador exclusivo de Fame
Faiveley Plast Beauty (VPI) ha fabricado el tapón pulverizador para el frasco de 80 ml de Fame. Este proyecto implica la integración de un chip NFC en el tapón pulverizador, que es también el cabezal del robot, así como un alto grado de automatización en el montaje de todo el conjunto. En cuanto a la estética, se ha optado por un atractivo acabado galvanizado dorado. Por último, el tapón del pulverizador está diseñado para permitir un fácil rellenado del producto, gracias a un sistema de desenroscado-montaje sensorial que garantiza la conservación de la fragancia. Esto añade una dimensión duradera al objeto.
VPI ayuda a las marcas a hacer la transición
Con Phantom y ahora Fame, Paco Rabanne se dirige a una nueva generación de consumidores que buscan nuevas experiencias de cliente y un compromiso tangible con la responsabilidad medioambiental. Este nuevo proyecto permite a VPI confirmar su capacidad para apoyar a las marcas de belleza y fragancias en una transición que es a la vez digital y ecológica.