Desde hace varios años, las empresas de la industria cosmética se han comprometido a desarrollar el ecodiseño de sus productos, en particular de sus envases. La reducción de recursos, la reutilización, la incorporación de materiales reciclados y la reciclabilidad figuran entre sus prioridades.
Sin embargo, señala Febea (Fédération des entreprises de la beauté), a la hora de evaluar la reciclabilidad de los envases, el marco normativo a escala europea e incluso internacional sigue sin estar claro, y la realidad técnica y económica del reciclado puede variar considerablemente de un país a otro.
Una iniciativa sectorial de colaboración
En este contexto, y sin esperar a la normativa armonizada prevista a nivel europeo sobre envases y residuos de envases (Packaging & Packaging Waste Regulation - PPWR), Febea y la asociación profesional de fabricantes de envases de plástico (Elipso) se han unido para publicar una guía sobre la reciclabilidad de los envases cosméticos.
Fruto de una estrecha colaboración entre fabricantes de envases y comercializadores, esta guía hace balance de la reciclabilidad de los envases en Europa e identifica las dificultades técnicas y las palancas potenciales para mejorar la reciclabilidad de los envases cosméticos de plástico. La idea es anticiparse a los requisitos normativos europeos y facilitar el diseño ecológico de los envases.
El documento se divide en dos secciones principales. La primera sección ofrece una visión general de la reciclabilidad, teniendo en cuenta los marcos normativos vigentes en Francia, Europa y a nivel internacional, los principios generales de la reciclabilidad (recogida, clasificación y regeneración) y los métodos y herramientas para analizar y medir la reciclabilidad de los envases cosméticos, manteniendo el enfoque multiescala (a nivel francés, europeo e internacional).
En la segunda parte de la guía se detallan seis casos prácticos correspondientes a categorías de envases emblemáticas del sector cosmético. Se refieren a tubos, estuches/palés/distribuidores de polvos, sticks, bombas, tarros y dip-ins.
Para cada uno de estos casos, se identificó en primer lugar el material predominante y su canal de reciclado (si lo había). A continuación se determinaron las perturbaciones más frecuentes en la clasificación y el reciclado: adhesivos, decoraciones (metal o etiquetas, por ejemplo), color negro, envases que contienen varios materiales diferentes, etc. Por último, se propusieron posibles soluciones y se evaluó su impacto. Por ejemplo, para sustituir los plásticos que no tienen canal de reciclado, como los estirénicos en los casos de maquillaje (que son de la misma familia que los poliestirenos), existen alternativas con materiales reciclables, pero tendrán un impacto importante en la inversión en nuevos moldes de producción y en las propiedades estéticas finales del envase: habrá que encontrar un compromiso en cuanto a la forma y el aspecto (brillo, transparencia, etc.). Estas recomendaciones pretenden guiar a todas las empresas de cosméticos en el camino hacia la reciclabilidad y reforzar el compromiso del sector con la transición ecológica.
Perspectivas para 2030
"Esta guía es mucho más que un documento técnico: es una auténtica herramienta de ecodiseño para toda la industria cosmética y demuestra nuestro compromiso colectivo con la transición ecológica. Trabajando juntos -fabricantes de envases y comercializadores- estamos esbozando los contornos de una industria cosmética más responsable, en la que cada envase se convierte en una oportunidad concreta de reducir nuestro impacto ambiental. Nuestro objetivo es reciclar 100 % de envases de cosméticos, manteniendo la excelencia de nuestros productos en términos de calidad y seguridad, afirma Emmanuel Guichard, Delegado General de Febea.
"La guía Febea-Elipso es algo más que una herramienta normativa para la toma de decisiones: establece un marco concreto para los compromisos de la industria en materia de ecodiseño para el reciclaje de envases cosméticos, incluso antes del 1 de enero de 2030, fecha de aplicación de las obligaciones de reciclabilidad establecidas en el Reglamento de Envases y Residuos de Envases (PPWR). Además de mejorar las condiciones de reciclado, esta anticipación voluntaria y conjunta por parte de fabricantes y comercializadores permitirá, durante el periodo 2025-2030, orientar las inversiones industriales de forma responsable y clara. Se trata de un ejemplo exitoso de puesta en común de competencias, que ya se ha logrado para la integración de los materiales reciclados y que merece transponerse a otros temas de la economía circular (la reutilización, por ejemplo) y a otros sectores.afirma Gaël Bouquet, Director General de Elipso.
Los autores de la guía señalan que la transición hacia envases totalmente reciclables exigirá una cooperación eficaz entre todos los agentes de la industria en materia de innovación (materiales) y diseño (forma y decoración) de los envases, inversión en procesos de producción y diseño de nuevos moldes adaptados a estos nuevos tipos de envases, y sensibilización de los consumidores respecto a estos nuevos códigos de mercado. Estos cambios considerables requerirán una reevaluación de todos los tipos de envases, en particular los utilizados para el maquillaje, de modo que puedan diseñarse teniendo en cuenta la reciclabilidad.
Se está preparando una versión en inglés de esta guía para facilitar los intercambios internacionales.
El documento en francés puede descargarse siguiendo este enlace enlace.
